Conocé los principales factores de riesgo de ACV y cómo prevenirlo.
El ACV es una enfermedad cerebrovascular que se produce cuando se tapa (ACV isquémico) o se rompe una arteria (ACV hemorrágico) en el cerebro. Decimos que se trata de un ataque porque sabemos que siguiendo hábitos de vida saludables y controles médicos periódicos puede prevenirse. Si puede prevenirse, no es un accidente.
Por minuto que tardamos en atender a un paciente con ACV, el cerebro pierde:
- 1.9 millones de neuronas
- 14 billones de sinapsis
- 7.5 millas de fibras mielinizadas.
Factores de riesgo para un ACV
Si bien la genética es responsable en 30% de los casos, otros factores son causa igualmente importantes para que ocurra un ACV:
- diabetes,
- hipertensión,
- mala o desordenada alimentación,
- sedentarismo,
- consumo de tabaco,
- consumo excesivo de alcohol, y
- consumo de drogas de abuso.
Cómo prevenir un ACV
Todos estos factores pueden evitarse o bien, controlarse. No esperes a la aparición de síntomas y empezá hoy mismo a colaborar en la salud de tu cerebro y tu cuerpo en general, realizando cambios saludables en tus hábitos:
- Alimentación e hidratación: consumí diariamente al menos una porción de frutas y verduras y 2 litros de agua por día.
- Evitá el consumo de cigarrillo, alcohol y las drogas de abuso.
- Actividad física: la que más te guste, pero todos los días durante al menos 30 minutos.
- Controles médicos: es importante que observes tu tensión arterial, colesterol y realices consultas periódicas si tenés obesidad y/o diabetes.
- Actividad intelectual: mantenerse intelectualmente activo. Además de leer, podés hacer juegos de memoria, rompecabezas, crucigramas, sopa de letras, etc. En nuestra cuenta de Instagram publicamos varios juegos que pueden entretenerte.
- Sueño: procurá tener un buen descanso nocturno, limitando el uso de aparatos electrónicos al acostarte.
- Mantené tu nivel de estrés bajo control y buscá ayuda en caso de ansiedad o depresión.
Algunos síntomas de ACV
- Dolor de cabeza intenso o sostenido en el tiempo.
- Parálisis facial parcial.
- Alteración en el lenguaje o dificultad para hablar.
- Debilidad o adormecimiento de brazos o piernas.
- Pérdida de equilibrio o falta de coordinación corporal.
- Mareos y sensación de confusión.
Cuando alguno de estos síntomas ocurre, se debe ir cuanto antes a un centro especializado, en lo posible dentro de las 12 hs de ocurrido el episodio. La Clínica la Sagrada Familia cuenta con un Centro Integral para el diagnóstico y tratamiento del ACV isquémico y hemorrágico; este Centro es el primero y único de Argentina que combina en un mismo espacio físico, tecnología de última generación y saber especializado.
Leé sobre nuestros chequeos médicos preventivos.