Durante los meses más fríos del año, es común que personas con hipertensión arterial sufran aumentos inesperados en sus valores de presión. ¿El motivo? Las bajas temperaturas provocan vasoconstricción: un mecanismo natural por el cual los vasos sanguíneos se estrechan para conservar el calor corporal. Este fenómeno, aunque fisiológico, aumenta la resistencia vascular y puede elevar significativamente la presión arterial, sobre todo en personas con antecedentes cardiovasculares o neurológicos.
A esto se suman otros factores típicos del invierno: menor actividad física, aumento en el consumo de sal (sopas instantáneas, embutidos, conservas) y disminución de la hidratación. El resultado es un escenario propicio para descompensaciones que muchas veces pasan desapercibidas hasta que aparecen las complicaciones.
Cuando la hipertensión no está bien controlada, se transforma en un riesgo serio para la salud. Puede derivar en ataques cerebrovasculares (ACV), infartos de miocardio, insuficiencia cardíaca y otras emergencias médicas.
En invierno, estos eventos aumentan. No es casual: el frío activa el sistema nervioso simpático, que eleva la frecuencia cardíaca y la presión. Además, muchas personas abandonan sus controles médicos en esta época, lo que favorece las crisis no detectadas a tiempo.
Los síntomas de alerta —dolor de cabeza súbito e intenso, visión borrosa, mareos, palpitaciones o dificultad para hablar— requieren atención médica inmediata. Las personas mayores, quienes viven solas o con enfermedades preexistentes, son especialmente vulnerables. Pero también quienes desconocen que son hipertensos: 1 de cada 3 personas con presión alta no lo sabe.
En la Clínica La Sagrada Familia contamos con equipos interdisciplinarios para el abordaje integral de la hipertensión arterial y las enfermedades neurocardiovasculares. Nuestro enfoque combina diagnóstico de precisión, seguimiento clínico y estrategias personalizadas de prevención, con especial atención a los factores de riesgo que se agravan en invierno.
Si tenés antecedentes familiares, ya fuiste diagnosticado o notás cambios en tu presión, podés pedir turno con nuestros especialistas. Porque prevenir un ACV o un evento cardíaco comienza por controlar la presión.