Alzheimer y salud cardiovascular

El 21 de septiembre, en el Día Mundial del Alzheimer, se busca concientizar sobre esta enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta el cerebro, provocando la muerte de células cerebrales y el deterioro de las conexiones neuronales. Esta pérdida de células resulta en síntomas como pérdida de memoria, cambios en el comportamiento, y dificultades en la toma de decisiones y en el lenguaje. 

Factores de riesgo del Alzheimer

Como ya mencionamos, el Alzheimer es una enfermedad progresiva cuya causa exacta sigue sin estar completamente clara. Sin embargo, se sabe que existen ciertos factores que influyen en su desarrollo. A continuación, te presentamos los más importantes:

• Edad: el riesgo aumenta con la edad, siendo más común en personas mayores de 65 años.
• Genética y predisposición familiar: los antecedentes familiares y ciertos genes (como el APOE ε4), pueden incrementar el riesgo.
• Cardiovasculares: la hipertensión, el colesterol alto y la diabetes tipo 2 están relacionados con un mayor riesgo.

Los factores cardiovasculares en el Alzheimer

La salud cardiovascular desempeña un papel fundamental en la prevención del Alzheimer. La hipertensión, el colesterol alto y la diabetes tipo 2, están estrechamente relacionadas con un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad neurodegenerativa, veamos cómo:

• Hipertensión: controlar la presión arterial es fundamental, ya que las personas con hipertensión tienen más probabilidades de desarrollar placas amiloides, proteínas tóxicas que se acumulan en el cerebro de pacientes con Alzheimer. La hipertensión no solo contribuye a la acumulación de estas placas, sino que también puede dañar los vasos sanguíneos cerebrales, afectando la salud general del cerebro.
• Colesterol alto: los niveles elevados de colesterol pueden contribuir a la acumulación de placas en el cerebro, lo que está relacionado con el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.
• Diabetes Tipo 2: esta condición metabólica afecta la capacidad del cuerpo para manejar el azúcar en sangre y puede llevar a complicaciones vasculares que incrementan el riesgo de Alzheimer. 

Qué podemos hacer

Aunque no es posible prevenir completamente el Alzheimer, adoptar un estilo de vida saludable y estar consciente de los factores de riesgo puede reducir significativamente la probabilidad de desarrollar la enfermedad. Mantener una rutina de actividad física regular, seguir una dieta equilibrada y mantener la mente activa son pasos clave. Comprender y gestionar los factores de riesgo es esencial para tomar medidas proactivas en el cuidado de la salud cognitiva.

Contactá a nuestra central de turnos para recibir orientación personalizada sobre la prevención del Alzheimer, obtener recomendaciones específicas para mejorar tu salud cardiovascular, y acceder al apoyo de nuestros especialistas.